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Karpov, A - Miles, A [B76] |
Desde el medio juego (que ya nos es familiar) se pasa rápidamente al final, donde Karpov deja patente su inmensa clase. 16...a6 17.Ae2 Cd7 18.f4 Controla e5, pero lo más importante, es que el alfil de casillas blancas tenga autopistas. Como ya vimos en las partidas de Amable - Pablo y Manuel - Amable, sendas victorias negras fueron trabajadas y producidas a raíz del alfil malo que quedó enterrado por sus peones en casillas blancas. 18...Cc5 19.Th3 La otra gran diferencia con las partidas anteriormente citadas. Aquí las torres blancas son más activas. 19...Tc7 20.Te3 b5 21.Axg7 Rxg7 22.Td4! a5?! 23.b4 Ca4? [23...axb4 Y si bien las blancas están un poco mejor, la posición negra ofrece buenas posibilidades.] 24.bxa5 Cc3 25.Af1 Rf8 26.Rb2 Tbc8 27.Rb3! Tc5 28.a6! Cxd5 Cuando la ventaja blanca parecía diluirse, viene este regalo que ya se venía preparando. Ahora veremos con claridad lo que nos parece imposible. 29.Txd5!! Txd5 30.Tc3! Td8 [30...Txc3+ 31.Rxc3 Tc5+ 32.Rb4 Tc7 33.Rxb5 Y nuevamente vemos como el rey define la partida.; 30...Tdc5 31.Txc5 dxc5 32.Ag2! Y el peón vale la torre.] 31.Tc7 Td1 32.Axb5 e5 [32...Tb1+ 33.Ra4 Tg1 34.a7 Ta8 (34...Txg4 35.Tb7) 35.Ad7!] 33.a7 exf4 34.Tb7 Tb1+ 35.Ra4 Txb5 36.Txb5 f3 37.Tb8 f2 38.Txd8+ 1-0 |