Frank Mayer
Por Albin Pötzsch, Meissen. Ampliado e ilustrado por Frank Mayer - revisado por Salvador Aldeguer

El desatino pocas veces resulta favorable

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Sucesos en el tablero

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Ikarus. © 09/2007 Christel van Lith christel-vanlith.de

 

Dr. Emanuel Lasker se encontraba por primera vez en los Estados Unidos en otoño del año 1893, siempre en “el camino hacia el Campeonato Mundial de Ajedrez”.

El ya “anciano para el ajedrez de competición”, William Steinitz había dado su conformidad al match para la conquista de la corona mundial, cuyo premio en metálico era de 3.000 $.

Lasker no disponía de esa cifra para poder desafiar al Campeón vigente. Para recoger dinero, se organizó un match entre el campeón americano cuyo apodo era “El león de Kentucky”, llamado así no solamente por su cabello “animal”, si no también por ser el jugador más fuerte del país en aquella época.

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Jackson Wipps Showalter y Dr. Emmanuel Lasker:
1893 en Kokomo/ USA

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Dr.Emanuel Lasker. Alemania

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Jackson Whipps Showalter. USA

  1 2 3 4 5 6 7 puntos
Showalter 0 1 ½ 0 0 0 0
Lasker 1 0 ½ 1 1 1 1

Muy poca memoria debían tener los organizadores, pero al final recordaron aquel encuentro, tan desastroso para Jackson Wipps Showalter:

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Jackson Whipps Showalter. USA

Entonces se acordó alterar el programa previsto e incluir un plus más llamativo al acontecimiento en el sentido, de que se enfrentaran el Dr. Lasker con la esposa del americano, Mrs. Ann Showalter, que a su vez se la consideraba la jugadora más en forma y campeona durante aquellos años.

Resumiendo se puede decir, que no fue una paseo para el Dr. Lasker, máxime cuando se acordó concederle a su adversaria un caballo de ventaja en cada partida.

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© Elke Rehder Fine Arts

El aspirante al trono mundial de ajedrez se excedió en su desatino y perdió por el resultado de 2:5.

Abajo queda indicado una de estas finales de las partidas:

Tablero
Dr. Lasker – Mrs. A. Showalter

Las blancas ya se encuentran en una situación peligrosa y tratan una desesperada contra-ofensiva: 1. Dh3 h6 2. Cxe6 ¡Cd1! Partiendo de una gran lección de jugadas que se ofrecen, las negras encuentran la respuesta más fuerte, que hizo pronunciar su capitulación por parte del Dr. Lasker. Un día más tarde, se pudo leer en la prensa neoyorquina de forma burlona:

“¡Lasker es Lasker, pero un caballo es un caballo!”

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Cortesía Arqto. Roberto Pagura, Buenos Aires

Sin embargo, al final todo este “desliz” tuvo un postulado conciliador en el sentido, de que William Steinitz redujo sus pretensiones económicas. En marzo de 1894 comenzó el match y a finales de mayo del mismo año, el Dr. Lasker consiguió la corona mundial de ajedrez.

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William Steinitz vs Dr. Lasker. 1894

 

Por Albin Pötzsch, Meissen

Ampliado e ilustrado por Frank Mayer - revisado por Salvador Aldeguer

Retoques y maquetación: Antón Busto

Sitges (Barcelona), octubre de 2009

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